Recordemos que la masa madre de cultivo o natural es el resultado de la fermentación espontanea producida por las bacterias y levaduras presentes en la harina y el agua.
Para hacer masa madre natural o de cultivo en casa de forma rápida, crearemos el entorno y condiciones adecuados para el desarrollo de estas bacterias y levaduras.
Es un proceso muy fácil porque la sencillez de la mezcla, pero, tal vez, lo más difícil sea su conservación y mantenimiento en condiciones óptimas.
Es decir, saber cuando hay que refrescarla o renovarla tras un periodo de inactividad, en qué momento debemos incorporarla a la mezcla, son cuestiones que con la experiencia tendrás claro de inmediato.
Como afecta y que le aporta la masa madre natural al pan
La masa madre natural aporta muchísimas ventajas al pan, por destacar algunas:
- Crea el aroma y sabor del pan proporcionándole una textura espectacular.
- El pan aguanta mucho más tiempo, incluso una semana conservándose perfectamente.
- Hace que el pan no se enmohezca protegiéndolo.
- Reduce el índice de glucemia del pan favoreciendo su mejor digestión.
En definitiva, te permite elaborar tu pan casero con levadura natural sin aditivos ni conservantes artificiales.
Elaboración de la masa madre rápida paso a paso
Consejos previos
Antes de comenzar el proceso, debemos preparar los ingredientes, lo ideal será utilizar una harina integral de centeno o trigo que nos acelerará el proceso.
También podemos utilizar harina blanca de trigo, pero el proceso con esta harina se alargará unos días más.
Muy importante para conseguir nuestro objetivo más rápidamente, el entorno, cuanto más calor tengamos más rápido ira el proceso.
Si hace más frio, también lo conseguiremos, pero nos costará más un poco más de tiempo.
Por eso en verano debido a las altas temperaturas, la fermentación se acelera vertiginosamente y hay que estar muy vigilante a su desarrollo.
Una forma de acelerar el proceso en los meses invernales, podría ser dejar nuestra masa encima de electrodomésticos que desprendan calor, frigorífico, router, etc.
Elaboración
Primer día: Coge un bote o tarro de plástico o cristal con capacidad suficiente y añade 50 gr. de harina trigo o centeno integral y 60 gr. de agua a temperatura ambiente.
Mezcla y remueve todo con una cucharilla, tapa el bote y deja reposar en un sitio cálido 24 horas, yo le he dejado encima del frigorífico por donde despide calor.
Segundo día: este día únicamente nos limitaremos a remover la mezcla existente, vuelve a tapar el bote y deja reposar otras 24 horas.
Tercer día: añade otros 50 gr. de harina integral y 50 gr. de agua, mezcla y remueve todo con una cucharilla y vuelve a reposar 24 horas.
Este día se puede observar alguna burbujita y olor a fermentación.
Cuarto día: desecha la mitad de la mezcla y añade 50 gr. de harina integral y 50 gr. de agua, mezcla todo con una cucharilla, tápalo y deja reposar 24 horas.
En este día ya se observan muchas burbujas y olor, la fermentación ya se ha acelerado.
Quinto día: la masa madre está muy activa, desecha la mitad de la mezcla y añade 50 gr. de harina integral y 50 gr. de agua, mezcla todo.
En unas horas dobla su volumen, se observa en el bote el rápido desarrollo de la masa, esto significa que ya tenemos nuestra masa madre preparada para hacer nuestro pan .
